¿Cómo pueden años, meses, días….
suspenderse en el aroma de tu llegada?
La vida nos puso en el mismo camino
esperaba que comprendiéramos el porqué
y ahora, en medio del huracán,
tomo tu mano como una madre a su hijo adolorido
y te digo que mires el cielo
te rehúsas, no comprendes, no confías.
Pero niño, ¿no aprendiste a volar?
Poco a poco crecen tus alas,
y descubres que te agradan
¿Cómo las uso? -preguntas-
Y yo solo digo…
-Abrázame-
Por Nisska Cruces